Hoy ha sido el turno de las grandes transformaciones del siglo XX, con los importantes cambios producidos a partir de los años cincuenta.
Para Pedro Pérez, moderador de la mesa redonda, ha recordado los inicios del Colegio y la Enfermería de principios del siglo XX , para dar paso a la evolución en la segunda mitad del pasado siglo.
Bizén d’o Río ha abordado el tratamiento de la enfermedad desde la óptica de las supersticiones que perviven la sociedad oscense y que dificultan la labor de la moderna medicina. Ha recordado, por ejemplo, la mística del correcto anudamiento del cordón umbilical, la canilla de conejo o los dientes de culebra, así como los “santos profilácticos o sanadores” y los cambios de luna y solsticios. Algo que, según ha comentado, se extiende hasta la actualidad, en una sociedad “que quiere vivir adelantada a sus tiempo, pero que hunde sus raíces en las tradiciones”.
Bizén d’o Rio durante su intervención.
Por su parte, Francisco Gracia, ha hecho hincapié en el recorrido realizado por la Enfermería en la segunda mitad del Siglo XX, partiendo de la creación del título de A.T.S. en 1953, que unifica las profesiones de Enfermera, Practicante y Matrona, pasando por la entrada de la formación de Enfermería en la Universidad con la Diplomatura en Enfermería, para culminar, a principios del siglo XX con la formación del Grado, alcanzando el máximo desarrollo académico, abriendo la puerta a la Investigación y el Doctorado.
Francisco Gracia durante su repaso de la Enfermería oscense.
En palabras de Pedro Pérez, Francisco Gracia “ha vivido la historia de la Enfermería superpuesta a su vida”. Gracia ha comentado, entre otros detalles, la rivalidad entre Enfermeras y Practicantes cuando se decidió aunar la profesión bajo el título de Ayudante Técnico Sanitario (A.T.S.) y ha destacado de esta denominación la palabra “técnico”, que viene acompañado de una tecnificación general en España y, en concreto, de una técnica que los profesionales de la época “tenían que descubrir”.
Francisco Gracia hizo un llamamiento al tratamiento humano: “los estudios hay que realizarlos mirando al paciente”.Emerson Buil durante su ponencia.
Finalmente, Emerson Buil ha hablado del surgimiento de la Escuela Universitaria de Enfermería en Huesca, su evolución hasta llegar a la etapa actual y su importancia para la sociedad oscense. La Escuela de Enfermería, ha recordado Buil, se creo cuando se construyó el Hospital San Jorge porque éste necesitaba enfermeras. Buil ha destacado varios hitos importantes de la historia de la Escuela como su inauguración en 1971, el paso de Escuela femenina a Escuela mixta, la impartición de clases de Enfermería por Enfermeras en lugar de médicos y la creación del Grado. Como balance, Emerson Buil ha concluido que han sido más de 1600 alumnos en 46 promociones, calificándola de “evolución meteórica de la Enfermería”, ya que, a su juicio, ninguna profesión ha evolucionado tanto en tan poco tiempo como la Enfermería.